Itaipu es una empresa que no obtiene logro y sigue las prácticas contables adoptadas en Brasil y Paraguay. Sus bases financieras están definidas en el Adjunto C del Tratado. El documento también prevé que la Eletrobras y la Ande deben contratar la potencia instalada disponible, lo que asegura una grande previsibilidad de receta y apoca riesgos consecuentes de crisis hidrológicas, ya que los recibimientos están relacionados a la capacidad de generación y no a la cantidad de energía producida.
Tres metas empresariales establecidas para 2015 se han cumplido: clasificación de riesgo, índice de equilibrio económico- financiero y el índice del exigible total sobre el EBITDA.
La solidez empresarial fue testificada por las principales agencias internacionales de clasificación de riesgo - Standard & Poor’s, Moody’s y Fitch. La evaluación hecha en 2015 mantuvo la nota máxima en la escala nacional, empresa AAA, cumpliendo así una de las metas empresariales de Itaipu. Para el próximo año, el objetivo es lograr de nuevo la clasificación nacional AAA.
El Índice de Equilibrio Económico-Financiero demuestra que las recetas operacionales suplieron 101% del coste del servicio de electricidad (meta variaba entre 98% y 102%), en el cual está incluso el resultado del ejercicio anterior. Notase una mejora en comparación al índice del año anterior (98,0%), debido a la reducción en los gastos de exploración, principalmente en virtud de la desvalorización del real y del guaraní frente al dólar, una vez que la grande mayoría de estos gastos son realizados en esas monedas y contabilizadas en dólares, moneda de referencia de Itaipu. Para 2016, la oscilación entre el 98% y 102% se mantuvo como meta.
Ya el Índice del Exigible Total sobre el EBITDA logrado fue de 5,7, dentro de la meta establecida para 2015 de ser menor o igual a 8. El indicador apocó con relación a los años anteriores debido a la reducción del endeudamiento y en el ejercicio de los pasivos consecuentes de las obligaciones actuariales. En este indicador también es percibido el efecto de la variación cambial ocurrida en el período. Con la proyección de reducción del Exigible Total y el mantenimiento y robustez del EBTIDA, el indicador tiende a mejorar (apocar) a cada año. Para 2016 se estableció la meta de menor que o igual a 7 para el índice.
La facturación consecuente de la prestación de los servicios de electricidad a la Eletrobras, en Brasil, y a la Ande, en Paraguay, totalizó US$ 3.680,8 millones en 2015, incluyendo la energía cedida por Paraguay Brasil. La receta acumulada desde 1985 (inicio del suministro facturado de energía eléctrica producida por la usina) totalizó US$ 75.337,3 millones.
Durante todo el año la moneda norte-americana tuvo grande valorización tanto en Brasil cuanto en Paraguay, pero independientemente de las oscilaciones, Itaipu cumplió con los principales compromisos asumidos para el ejercicio. Entre ellos, el pago integral de todas las parcelas del servicio de la deuda (contraída para la construcción de la usina) vencidas en 2015. Ésas totalizaron US$ 2.057,1 millones (siendo US$ 1.251,2 millón de amortización del principal y US$ 805,9 mil de costes financieros). El saldo a ser amortizado hasta el año de 2023 es de US$ 11.435,9 millones.
El Adjunto C prevé que la tarifa (definida en Itaipu como el coste unitario del servicio de electricidad) cobrada debe ser suficiente para cubrir todos los costes del servicio (vea abajo). La tarifa aplicada durante todo el ejercicio de 2015 fue de US$ 22,60 por kW de potencia mensual contratada, valor practicado desde 2009, siendo que 63% de esa tarifa es utilizada para el pago de la deuda de construcción de la usina. Desde el momento en el que la energía sale de Itaipu, hay costes de transmisión y distribución que son agregados hasta la llegada al consumidor final.
- Royalties:
Compensación financiera debida a los gobiernos brasileño y paraguayo por la utilización del potencial hidráulico del Rio Paraná para la producción de energía. - Rendimiento del capital invertido:
Remuneración debida a la Ande y a la Eletrobras en el valor del 12% al año sobre la participación en el capital integrado, actualizado monetariamente. - Gastos de exploración:
Costes corrientes con personal, materiales, bienes y servicios. - Costes financieros y amortización de empréstitos y financiaciones:
Valores pagados a título de costes financieros y amortización de la deuda. - Resarcimiento de costes de administración y supervisión:
Remuneración debida igualmente a la Ande y a la Eletrobras para compensar financieramente los esfuerzos de administración y supervisión. - Resultado de la cuenta de exploración en el ejercicio:
Balance anual entre la receta y el coste del servicio de electricidad.