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Medio Ambiente
“Falta mayor apropiación de la yerba mate por parte de los paraguayos”
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13/07/2011

“La yerba mate es un elemento que identifica a todos los paraguayos, pero sin embargo, muy poco conocemos de ella”, así lo refirió Margarita Miró, historiadora y directora del Instituto Superior de Bellas Artes, durante su disertación sobre la “Historia de la Yerba Mate”, realizada el martes 12 de julio, en el stand de Itaipu de la Expo Feria en Mariano Roque Alonso.

La historiadora reconoció que la historia de la Yerba Mate se encuentra ausente en los textos escolares, en las revistas científicas, en la propia historia paraguaya. “En un análisis de todo lo publicado en el bicentenario ¿qué espacio se le dedicó a la yerba mate? ¿Cuánto de estos textos lo publican?”, cuestiona Margarita, para luego responder que si bien, en una parte del libro editado de Eligio Ayala figura un capitulo breve del tema, no se profundiza, ni se le da el valor que requiere el tema, como elemento de cultura e identidad paraguaya.

“Del Dr. Francia nada nuevo se dijo y fue un gran defensor de los indígenas, por la explotación que sufrían trabajando en los yerbales”. Resaltó que también se podría destacar lo establecido por Carlos Antonio López: “que la yerba mate se estacione dos años a fin que sea más sabrosa”.

“Los paraguayos deberíamos revalorizar esta sabiduría guaraní, dar el espacio merecido a este conocimiento que tendría que ser como un emblema para nosotros que usamos el idioma guaraní. La yerba mate como planta sagrada, como planta con tantos nutrientes, con tanto valor, inclusive para el sistema nervioso, cerebral. Revalorar todo lo que fue en el proceso de nuestras guerras, de nuestras luchas, lo que contribuyó para el pueblo paraguayo y para otros continentes que comprobaron las bondades de esta yerba, y lastimosamente no podemos darle un mayor valor por que no conocemos, no sabemos de la historia, no nos apropiamos de ella”, aseveró.

Miró mencionó además, que en respuesta a la ausencia de la historia de la yerba en todos los espacios, ya sea en la historia, en los medios de comunicación, en la educación, en otras áreas, se ha convertido en una promotora de los valores de la yerba mate, lo que la motivo a rebuscarse entre los pocos datos históricos paraguayos que existen, a fin de dar una mayor visibilización a este elemento ancestral.

“Esto debería ser una apropiación valiosísima, y como paraguaya y defensora de la historia de la Yerba Mate me duele profundamente, lastimosamente no se le da el espacio merecido, para mí sería uno de los temas emblemáticos para promocionarlo dentro de la Independencia”, puntualizó

Breve Historia de la Yerba Mate

Las primeras referencias de la yerba mate datan de los españoles, atribuyéndose a Ruiz Díaz de Guzmán, el descubrimiento del uso de las hojas de yerba mate en el año 1592. Este habría encontrado en las "guayacas" (Pequeños sacos de cuero en el que el indio transportaba sus más preciados bienes) de indios hostiles tomados prisioneros, envueltos en delgadas y suaves pieles, un polvo que resultó ser "ka’a".

Luego, en 1612, las virtudes que se le atribuyen, y a los que se refieren numerosos relatos de aquellos tiempos de Hernando Arias de Saavedra, hicieron que su consumo se difundiera en forma extraordinaria al punto de organizarse un intenso tráfico regular del producto, desde su zona de origen a todo el virreinato.

Más tarde, los jesuitas radicados en el Paraguay a comienzos del siglo XVII, a fin de evitar las grandes distancias que los separaban de los lugares de producción, introdujeron el cultivo en algunas de sus "reducciones" o "misiones" distribuidas en la región que hoy es parte del MERCOSUR.

Denominación de la yerba mate

Al mate se lo denomina también té del Paraguay, té mate, té brasileño, té de Misiones, té de Bartholome, té de los jesuitas, ka'a.

Se cultivó en grandes cantidades a impulso de los jesuitas (1609-1768). Quienes al principio afirmaban que era el demonio el que instruyó a los indios sobre su uso y que empleada de un modo u otro implicaba un pacto con el mismo. Incluso hay una carta dirigida al Tribunal de la Inquisición en Lima, en la que se consigna que el uso de la yerba "es una superstición diabólica que acarrea muchos males".

En cambio, Escalona Agujero, 1675, comenta que "es general en aquella región, que San Bartolomé la mostró y descubrió a sus naturales" de allí el nombre de Hierba de San Bartolomé.

Nombre científico

Científicamente se conoció la planta de yerba mate en Europa desde principios del siglo XIX con la denominación de "Ilex theazans" dada por Bonpland en 1821, en tanto que Saint Hilaire en 1822, denominó Iles paraguariensis usando esta denominación de especie en razón de que los antiguos historiadores españoles usaban para el adjetivo "paraguayo" la palabra latina "paraguariensis". También surgieron muchísimas otras descripciones científicas más, tales como: Ilex paraguayensis; Ilex Mate; Ilex paraguensis Lambert; Ilex paraguaiensis Unger; Ilex Curitibensis, entre otros.
La yerba mate Pertenece a la clase de las dicotiledóneas, diapétales corolianas, familia de las Aquifoliáceas, del género Ilex que comprende casi toda la familia (175 de las 181 especies) dispersas en toda Sudamérica.

Características

En el cultivo y explotación racional, por razones prácticas, se mantiene su altura entre unos 3 a 6 metros presentando un corto tronco que se ramifica a escasa altura del suelo, por sucesivas podas,- el aspecto de un pequeño arbusto.

En estado silvestre necesita unos 30 años para su desarrollo completo. Alcanza alturas de 16 metros, formando un majestuoso árbol, cargado de hojas, de tronco recto de hasta 50-70 centímetros de diámetro, de corteza lisa y color grisáceo-ceniciento.

Sus hojas perduran en la planta unos tres años, son alternas coráceas, de forma cuneiforme, ovales o elípticas, con borde ligeramente dentado. Sus dimensiones difieren según las variedades.

En estado de plena madurez son espesas, duras y lucientes como enceradas, de color verde más intenso en su cara superior que en la inferior presentando un corto pecíolo de color claro verdoso, a veces ligeramente rosado.

Su nervadura central y secundaria, se destaca netamente por su color amarillo verdoso en la cara superior de la lámina foliar, y por ser muy salientes en la cara inferior.

Proceso de la yerba mate

En época colonial se le denominaba mina, pues se la recogía a cielo abierto sin cultivar. Los árboles se podan cada dos años, se arrancan las ramas tiernas con las hojas, se arman grandes fardos para sacarla del monte. Se pasa por la llama viva para quitarle las toxinas o piriri âra. Luego se coloca en el barbacúa en donde se secan las hojas hasta que tomen un verde mate Ka´a. Se tritura y se guardan en bolsas que se estaciona mínimo un año.

Tecnología

“Lastimosamente toda la obtención de la yerba mate para volverla consumible no se ha incorporado en nuestros léxicos ni observados desde el punto de vista medicinal, ni de la física y química, razón por la cual fuera del uso en el mate, terere y cocido el paraguayo no tienen una valoración de su utilización, ni rendirle el homenaje que le corresponde, duele decir pero en Argentina, Brasil y Uruguay existe una apropiación mayor de esta planta”, refirió Margarita Miró.

Otras Propiedades de la yerba

Contiene cafeína y tanino y se la ha empleado como agente tónico, diurético, estomacal, estimulante, y en grandes dosis, de laxante.

El Dr. Doublet en su libro "Le Mate" expresa: "El mate es un regulador cardíaco, nervioso y muscular. En casos de alimentación insuficiente, restablece el equilibrio impidiendo la decadencia del organismo. Durante un ayuno prolongado permite una labor igual a la que produce alimentándose normalmente, mantiene la energía física y moral y posibilita soportar pesadas fatigas".

La Yerba Mate contiene minerales en cantidades no despreciables, como por ejemplo: calcio, magnesio, hierro, manganeso, fósforo, azufre, cloro, ácido salicílico. La yerba que previamente cebada y colada se pone en un lienzo y se aplica al cuero cabelludo es buenísimo para evitar la caída del pelo y una de las razones es la cantidad de vitamina C que contiene. El químico francés Carlos Duval pudo decir: el Mate está destinado a tener un gran porvenir en la terapéutica, por haberse reconocido en él uno de los mejores y más poderosos antisépticos que se conocen. Los doctores Bougier, Lichhe, Doullet, Faure y otros más, han hecho interesantes experimentos.

El mate cocido es bueno para lavar heridas y llagas que supuran, es desinfectante y al mismo tiempo madurativo. Gárgaras de la Yerba Mate son buenas en la escarlatina. Fomentos fríos con mate cocido curan las quemaduras y calman el dolor.

La yerba y las verrugas

Se queman los palitos de la yerba y estando incandescentes se aplican a la verruga madre y se arroja el palillo. Luego de unos días desaparecerán todas sin dejar rastros.

La yerba mate y las tinturas

Encontramos que la yerba mate era usada como tinte de color negro en la ciudad de Buenos Aires. Según las crónicas, la yerba que se humedecía durante los largos viajes ya no servía para el consumo pues la hoja adquiría un color negro muy fuerte y por tanto era usada como colorante negro